*Como aquel temón de Scorpions, que da título a éste post, se vienen cambios varios en nuestro querido automovilismo.
Para empezar la bomba la tiró Oscar Aventín anunciando que se va de la ACTC tras 2 décadas al frente de la misma y que, en un 90% su sucesor será Hugo Mazzacane. Se rumorea, además, que el Gurí Martínez, quién demostró el fin de semana que puede vencer el paso del tiempo al pasar la escoba y llevarse todo en Olavarría y Guillermo Ortelli formarían parte de la Comisión Directiva de la ACTC. Creo que el cambio al estilo monárquico no va a producir grandes cambios pero puede haber una mayor fluidez entre dirigentes y pilotos para trabajar mancomunadamente en función de la seguridad.
En tanto la CDA del ACA decidió ponerle un freno a las intenciones de Pablo Peón de correr en el circuito callejero de Santa Fé con la variante de pasar por encima de las vías del tren, saludable que haya sido así y que se ponga los pantalones con las dos fechas en que se siguen superponiendo, una cosa insólita, el SúperTC2000 y el Turismo Nacional en Octubre y Noviembre. Sería bueno que se apuren y logren solucionar un conflicto de intereses políticos y económicos para que no se perjudique el automovilismo entero. A su vez, Peón anunció que tiene intenciones, en un mediano plazo, de dejar el SúperTC2000 y abandonar el automovilismo decisión que le puede permitir a Víctor Rosso, quedar a cargo de la misma. Quizá el cambio de Rosso por Peón puede ser mas interesante porque, está claro, ambos tienen ideas muy diferentes sobre la concepción de la categoría. Todo a su tiempo.
Otro cambio, pero que ya se produjo, fue la salida de Alejandro Urtubey como gerente del Top Race y su reemplazo por Javier Azar. Azar ya anunció que la categoría volverá al campeonato tradicional, sin etapas, pero con carreras especiales previamente establecidas y la incorporación de carrocerías de Ford Mustang y Chevrolet Camaro en lugar del Mondeo y Cruze, respectivamente. Si pueden solucionar la parte económica, que hizo tambalear a la categoría, la parte deportiva la pienso como una mezcla de Nascar y DTM lo cual no se como va a terminar resultando. Se me hace que va a ser muy raro ver a autos con concepciones tan diferentes pero Azar y su gente confían en recuperar la confianza perdida por los despilfarros del "patrón de estancia" de Urtubey.
Dejé para el final una pequeña sensación acerca del terrible palo de Tomás Cingolani en Rosario. Siento que es muy difícil cambiar ciertas cosas si cuando se hace un autódromo hacen un paredón en el que el riesgo de golpe es muy alto, asfalto que tiene ondulaciones, dirigentes que se manejan por intereses y pilotos oficinistas que no parecen estar muy interesados en su seguridad, sin olvidar que ellos son los "monitos del circo", quienes hacen que todo funcione.
Para empezar la bomba la tiró Oscar Aventín anunciando que se va de la ACTC tras 2 décadas al frente de la misma y que, en un 90% su sucesor será Hugo Mazzacane. Se rumorea, además, que el Gurí Martínez, quién demostró el fin de semana que puede vencer el paso del tiempo al pasar la escoba y llevarse todo en Olavarría y Guillermo Ortelli formarían parte de la Comisión Directiva de la ACTC. Creo que el cambio al estilo monárquico no va a producir grandes cambios pero puede haber una mayor fluidez entre dirigentes y pilotos para trabajar mancomunadamente en función de la seguridad.
En tanto la CDA del ACA decidió ponerle un freno a las intenciones de Pablo Peón de correr en el circuito callejero de Santa Fé con la variante de pasar por encima de las vías del tren, saludable que haya sido así y que se ponga los pantalones con las dos fechas en que se siguen superponiendo, una cosa insólita, el SúperTC2000 y el Turismo Nacional en Octubre y Noviembre. Sería bueno que se apuren y logren solucionar un conflicto de intereses políticos y económicos para que no se perjudique el automovilismo entero. A su vez, Peón anunció que tiene intenciones, en un mediano plazo, de dejar el SúperTC2000 y abandonar el automovilismo decisión que le puede permitir a Víctor Rosso, quedar a cargo de la misma. Quizá el cambio de Rosso por Peón puede ser mas interesante porque, está claro, ambos tienen ideas muy diferentes sobre la concepción de la categoría. Todo a su tiempo.
Otro cambio, pero que ya se produjo, fue la salida de Alejandro Urtubey como gerente del Top Race y su reemplazo por Javier Azar. Azar ya anunció que la categoría volverá al campeonato tradicional, sin etapas, pero con carreras especiales previamente establecidas y la incorporación de carrocerías de Ford Mustang y Chevrolet Camaro en lugar del Mondeo y Cruze, respectivamente. Si pueden solucionar la parte económica, que hizo tambalear a la categoría, la parte deportiva la pienso como una mezcla de Nascar y DTM lo cual no se como va a terminar resultando. Se me hace que va a ser muy raro ver a autos con concepciones tan diferentes pero Azar y su gente confían en recuperar la confianza perdida por los despilfarros del "patrón de estancia" de Urtubey.
Dejé para el final una pequeña sensación acerca del terrible palo de Tomás Cingolani en Rosario. Siento que es muy difícil cambiar ciertas cosas si cuando se hace un autódromo hacen un paredón en el que el riesgo de golpe es muy alto, asfalto que tiene ondulaciones, dirigentes que se manejan por intereses y pilotos oficinistas que no parecen estar muy interesados en su seguridad, sin olvidar que ellos son los "monitos del circo", quienes hacen que todo funcione.
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